En el año 2001 la Argentina colapsó. No fue un proceso natural, fue el resultado esperable luego de años de ficción cambiaria, viajes al exterior, pizza con champagne, endeudamiento y privatizaciones. El resultado fue el que conocemos: desocupación y deuda impagable.
Hoy estamos en la primera fase de ese proceso: atraso cambiario, dólar barato, viajes para la clase media, negocio financiero para los ricos, inflación estable y baja (comparativamente). La contracara es la deuda que se acumula, los puestos de trabajo que se pierden y el entramado industrial que se desarma al calor de la apertura importadora.
El final será el mismo. Desempleo, deuda, más pobreza, explosión financiera cuando se revierta el flujo. Los perjudicados serán los mismos de siempre. El cuerpo lo pondrá el pueblo, seguro la policía reprimirá. Nada nuevo bajo el sol.
Pero esta política de ajuste, saqueo y represión tiene un elenco, una planta permanente que está presente en los 3 gobiernos que arrasaron a nuestra patria. No se fueron todos. Se fue De la Rúa, luego se fue Macri, pero la planta permanente del saqueo está en primera fila.
Tienen esa sonrisa de los que siempre ganan. De los que no la tienen que pelear en la vida. La sonrisa de los que tienen todo resuelto. La sonrisa cínica de los que disfrutan el dolor ajeno.
La planta permanente del saque está conformada así:
- Bullrich: funcionaria de De La Rúa, Macri y Milei. Está a cargo de disciplinar. Es miembro fundadora del partido de la violencia. No importa desde qué mirada ideológica, siempre está del lado de la violencia. Hoy, igual que con Macri, se encarga de cagar a palos a los que salen a protestar por las consecuencias de la política económica.
- Sturzenegger: Funcionario de De la Rúa, Macri y de Milei. Estuvo a cargo del megacanje, luego fue presidente del Banco Central y hoy desregula. Su rol histórico es el de desarrollar el engranaje institucional para facilitar los mecanismos de fuga de capitales. Genera las condiciones jurídicas para que el robo de nuestro patrimonio no tenga consecuencias legales. Es un empleado del poder económico global.
- Caputo: Funcionario con Macri y Milei. Es el encargado de generar los instrumentos financieros para robar el trabajo de los argentinos. Nunca laburó, no sabe lo que es una fábrica, ni pagar un sueldo. Se ocupa de comprar y vender papeles, dicen que es muy bueno. Esta cualidad sería admirable si trabajara en el sector privado, el problema es que ahora se está fumando la nuestra. Es un timbero, un jugador. Como dijo Macri, un adicto a la deuda .
Esta tríada forma la planta permanente del saqueo a nuestra patria. La historia guarda el peor de los lugares para ellos. Este consenso sádico también pasará y, al igual que los estafadores de Milei y su hermana, seguramente terminen en cana. La justicia dirá.


